Reflexiones de Semana Santa
Carta a la comunidad
27 de marzo, 2018
Mi querida comunidad,
Mientras vivimos esta Semana Santa como UN CORAZÓN en Jesús crucificado con María, muchas de las Madres y Misioneros de la Cruz están sufriendo enormemente con situaciones muy difíciles que Dios está permitiendo. Ayer les envié un documento para alentarles en su identidad y misión como las pequeñas almas víctimas de Dios. Hoy les escribo desde mi corazón para animarlos a PERSEVERAR y no permitir que se desperdicie una gota de sus sufrimientos, porque es verdaderamente una gota de la Preciosa Sangre de Jesús que no recogeríamos con el paño vivo que es nuestra vida. Mi reflexión viene del evangelio de Juan 12 y 13:
Jesús es glorificado en el madero de la Cruz y, a través de Él, el Padre es glorificado (12,23). Jesús nos dice que lo sigamos (12,26), por lo tanto, también debemos seguirlo a la Cruz para morir como uno con Él (12,24). De esta manera, somos resucitados, no solo en el cielo con la corona de gloria, pero también en la tierra, como la nueva creación del Padre: los nuevos Adanes y las nuevas Evas que glorifican al Padre en la tierra. Estos son los hombres y las mujeres, los discípulos de Cristo, que viven "Venga Tu Reino en la tierra como en el cielo”, y solo ellos, los apóstoles de la Luz de Dios, pueden propiciar el comienzo de “Venga Tu Reino”.
Todos nosotros, porque aún no hemos muerto a nosotros mismos, deseamos ser grandes predicadores, poder sanar, hacer milagros, ser maestros, profetas, administradores, trabajadores apostólicos, héroes, etc., pero sin la Cruz. Por lo tanto, nuestras obras dan poco fruto, mas bien glorificamos nuestro ego. Luchamos siguiendo a Cristo diariamente a la Cruz para morir a nosotros mismos, para morir por — por medio de humillaciones, calumnias, discriminaciones, rechazos, dificultades, sufrimientos, enfermedades, traspasos, abandonos — a lo que nos hemos convertido y que no somos, sufriendo TODO como uno con el sacrificio de amor de Cristo.
Jesús nos da un nuevo mandamiento: amarnos unos a otros, así como yo les he amado (Jn 13,34).
¿Cómo me ama Jesús?
Recibe sobre su cuerpo mis heridas y transgresiones. Él, voluntariamente, como el Hijo–Víctima del Padre, sufre mi infidelidad, tibieza, indiferencia, quebranto ... colgando silenciosa y pacientemente en el madero de la Cruz. Él se convierte en el Sacrificio–Víctima por mi, para que yo pueda convertirme en la nueva creación a imagen y semejanza de Dios.
Luego debo elegir amar a los más difíciles en mi vida: al jefe, al superior, la esposa, el que me humilló, acusó, traicionó y me despidió. La persona que me utilizó y me abandonó. Aquellos —madre, padre, hermano, hermana— que me hirieron faltándome el respeto y deshonrándome. Debo elegir amarles y recibir voluntariamente sus quebrantos en mi corazón, limpio de todo resentimiento, frustración, enojo, venganza y odio, y sufrir con Cristo solo por Amor mientras oro por ellos, especialmente en el Sacrificio de la Misa.
Peregrinación Tierra Santa, Jueves, día 8, 2/11/2017, en Getsemaní, ante de la roca en que Jesus oró:
Amor Crucificado ha sido llamado a PERMANECER Conmigo mientras sigo derramando lágrimas por Jerusalén; permanecer Conmigo en mi continua agonía por las almas, para participar Conmigo en la salvación del mundo, eligiendo diariamente recibir el quebranto de las almas que he puesto en sus vidas y sufriendo Conmigo por ellas. El tiempo de la gran destrucción se acerca, muchas almas se perderán, oirán el lamento de Jerusalén en todo el mundo. Tráiganme las almas víctimas para que sufran Conmigo a fin de obtener gracias de conversión para muchas almas, que de lo contrario se perderán. Crean en el poder de sus vidas ocultas sufriendo Conmigo.
Jesús me ama mientras espera pacientemente, prisionero del tabernáculo, para que le abra mi corazón, para que me haga completamente vulnerable, que me despoje de mis vestiduras, mis máscaras y mi identidad falsa. Yo también debo amar con paciencia y expectante espera a que las almas más cercanas a mí abran sus corazones a Cristo. Debo elegir a diario vivir preso en el martirio oculto de Jesús y María, mientras sufro con fe expectante, por mí y por mi territorio de las almas.
Jesús recibe la negación y la traición de Pedro y Judas con una mirada de amor tierno mientras Sus lágrimas, unidas a las de María, suplican al Padre. Yo también debo mirar a aquellos que me han negado y traicionado con la mirada de amor de Jesús. Esto solo es posible si le permito al Espíritu Santo atraer mi corazón, herido y traspasado, al corazón herido y traspasado de Jesús, y a través del DOLOR que Él me permite sufrir, encontrar su mirada. ¡Entonces puedo contemplar a aquellos que me han traspasado a través de la mirada del Amor! ¡Dios es glorificado y la muerte no tiene poder!
Solo cuando alguien valora el amor más que la vida, es decir, solo cuando alguien está dispuesto a poner la vida en segundo lugar por amor, es que el amor puede ser más fuerte, mas fuerte aun que la muerte. —Papa Benedicto XVI
Mis preciosos hermanos y hermanas, debemos RECORDAR quienes somos en Amor Crucificado acabamos de meditar sobre nuestra historia en nuestro encuentro y que Colombia lo haremos otra vez. El Señor nos ha pedido que ayudemos con la renovación de nuestros hermanos: el ejército de Dios para propiciar el Reino del Inmaculado Corazón de María con el nuevo Pentecostés y el Reino de Dios en la tierra. DEBEN montar sus caballos blancos🔗 y vivir sus sufrimientos siendo UNO con Amor Crucificado para que sus vidas, como la Espada del Espíritu de Dios, pueda luchar esta guerra y que el triunfo de Dios se cumpla en el mundo.
3/8/17
Demonios de lujuria, pornografía, vergüenza, orgullo, arrogancia y miedo a la intimidad. Estos demonios aún están actuando ... porque, desde el principio, ... han sido llamados a ser Mis guerreros de los últimos tiempos. (xx), entre otros, se ha preparado, y se están preparando para luchar contra estas legiones de Satanás. Ya he vencido a Satanás y a todos los principados de la muerte, a través del poder de Mi amor crucificado. Esos ángeles de la muerte solo pueden ser combatidos a por Mí, conmigo y en Mí, en el poder del Espíritu, a través de la Cruz. Estoy revistiendo a Mi soldado de luz con Mi humildad, pureza e inocencia infantil. Debe vivir conociendo su nada y su debilidad, porque soy Yo quien es todo: todo poder y fuerza. Reza por mayor confianza y abandono, para que la autoridad de Mi Espíritu pueda ser encendida en él, para expulsar a los demonios del infierno. La fuerza oculta de Mi pequeña semilla de mostaza (Comunidad AC) es el poder de la fuerza de Dios que se mueve a través de él. Mi (XX) será mi ejército santo para estos tiempos finales.
6/8/17
Mi pequeña, conoce que estoy complacido contigo porque has respondido al clamor de Mi voz. Mi pequeña, este es un tiempo de derramamiento de gracia para Mi pequeña semilla de mostaza.
A cada uno de ustedes se le está dando la gracia de ser transformados en Mis hostias vivas para bendecir, liberar de ataduras y liberar innumerables almas. Véanse como Mis guerreros cabalgando hacia el horizonte. Esta santa flota es la luz del amor de Dios que tiene el poder de arrojar al infierno a los espíritus de las tinieblas que ahora están cubriendo la tierra. Mi triunfo será un gran triunfo logrado a través de la fuerza más oculta de Dios: el martirio oculto de Mi Sagrado Corazón y el Inmaculado Corazón de Mi Madre. Respondan sufriendo todo conmigo en Mi sacrificio de amor. Respondan con valor y celo, creyendo que Dios los ha elegido para participar en el triunfo de Mi amor crucificado para salvar al mundo. Crean que, como Mis guerreros, los anawims ocultos de Dios, han montado sus caballos y han comenzado a luchar en la gran batalla por la salvación del mundo. Permanezcan firmes, viviendo diariamente lo que les he enseñado. No tengan miedo, porque el triunfo de Mi Sagrado Corazón, a través del Inmaculado Corazón de María, está cerca. Propicien el triunfo de nuestros Dos Corazones.
Confía en las palabras que hablo en tu corazón y compártelas con perfecta fe y esperanza en el Dios que te ama. Ve en paz.
¡¡¡¡¡“Animo”, mi familia!!!!! ¡Lucha con valentía, con tus ojos fijos en nuestro Amor crucificado, porque Él es nuestra fuerza para perseverar hasta el final como los santos guerreros de la luz de Dios!
“Aquí hay un llamado para la perseverancia y la fe de los santos.” (Rev 13,10)
Lourdes †